Fuente El clérico caldeo Paulos Faraj Rahho fue privado de su libertad junto a otras tres personas en el distrito de al-Nour. El ataque habría sido perpetrado por Al Qaeda y fue repudiado por el Vaticano Hombres armados secuestraron el viernes al arzobispo católico caldeo de Mosul en esa ciudad del norte de Irak y mataron a su conductor y a dos guardias, dijo la policía. En Roma, el Papa Benedicto XVI condenó el secuestro del arzobispo Paulos Faraj Rahho, calificándolo como un crimen "despreciable" e instó a los hombres armados a liberar al prelado. El portavoz de la policía provincial, el brigadier general Khaled Abdul Sattar, dijo que Rahho fue secuestrado en el distrito de al-Nour, al este de Mosul, cuando dejaba una iglesia. "Hombres armados abrieron fuego contra el auto, matando a los otros tres y secuestrando al arzobispo", sostuvo. Aunque la violencia en gran parte de Irak ha disminuido en los últimos meses, funcionarios iraquíes y norteamericanos dicen que Mosul, la tercera ciudad más grande del país, es el último bastión urbano de Al Qaeda. Las autoridades consideran que el grupo islámico es la principal amenaza a la seguridad de Irak. Un asistente del cardenal Emmanuel III Delly, el patriarca caldeo de Bagdad y líder espiritual de los católicos de Irak, dijo que ellos habían escuchado que las tres personas habían sido asesinadas y que no sabían el destino de Rahho. Los caldeos pertenecen a una rama de la Iglesia Católica Romana que practica un antiguo rito oriental. La mayoría de sus miembros se encuentran en Irak y Siria y forman la comunidad cristiana más grande en Irak. El Vaticano dijo en un comunicado que el Papa estaba entristecido por este "nuevo acto despreciable", al que calificó de un hecho criminal premeditado. "El Santo Padre pide a la Iglesia Universal que se una en su ferviente plegaria para que la razón y la humanidad prevalezcan en los secuestradores y monseñor Rahho sea devuelto pronto a su congregación", dijo el comunicado. En la declaración, el Vaticano añadió que el Papa se sentía cercano al pueblo iraquí, particularmente a la minoría cristiana, y que rezaba para que todo el país pueda hallar el camino hacia la reconciliación y la paz. Varios clérigos cristianos fueron secuestrados o asesinados e iglesias han sido atacadas con bombas en Irak desde la invasión liderada por los Estados Unidos en el 2003. Fuente: Reuters