el Consejo 4214 de Veracruz,comparte con ustedes los saludos del Papa y del Presidente de México por la Conv.Suprema 2009

Saludos a la 127 Convención Suprema Mensaje Papal, transmitido este año a través de una carta de Su Eminencia Cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado del Vaticano, a la 127 Convención Suprema que tiene lugar del 4 al 6 de agosto de 2009 en Phoenix, AZ. Papa Benedicto XVI Cardenal Tarcisio Bertone Al Señor Carl A. Anderson Caballero Supremo de Caballeros de Colón Su Santidad el Papa Benedicto XVI se sintió complacido al enterarse que del 4 al 6 de agosto de 2009 tendrá lugar en Phoenix, Arizona, la 127 Convención Suprema anual de Caballeros de Colón. Me pidió transmitir sus cálidos saludos personales a todos los asistentes, junto con sus piadosos buenos deseos para la ocasión. Su Santidad se complace en observar en el tema de la Convención de este año -- “Con Pedro en solidaridad con nuestros obispos y sacerdotes” – un oportuno recordatorio de la importancia de un testimonio unido y claro del Evangelio por parte de todos los bautizados, basado en la comunión con la fe apostólica y la pertenencia al único Cuerpo de Cristo que es la Iglesia. Durante su Visita Pastoral a Estados Unidos el año pasado, afirmó que esta “unidad de visión y de intentos” es el secreto del crecimiento de la Iglesia en Norteamérica (Homilía en la Catedral de San Patricio, 19 de abril de 2008) y un elemento indispensable de la nueva evangelización. La Iglesia es llamada a expresarse con una voz unificada no solo al entregar el mensaje cristiano como la buena nueva de salvación para todos los pueblos, sino también al trabajar para renovar y transformar la sociedad defendiendo aquellas verdades morales inalterables inscritas en nuestro corazón por el Creador (cf. Romanos 1,19-20), perceptibles para la razón correcta y esenciales para la construcción de una sociedad justa, libre y compasiva. En tiempos de creciente confusión ética y a la luz de nuevos y graves ataques contra el derecho a la vida y las instituciones fundamentales del matrimonio y la familia, el testimonio profético de la Iglesia de dichas verdades se necesita con mayor urgencia aun, como un servicio genuino al bien común. Por esta razón, el Santo Padre alienta los admirables esfuerzos de los Caballeros para promover el conocimiento del rico cuerpo de las enseñanzas sociales de la Iglesia y, en unión con los obispos como “auténticos pregoneros de la fe” (Lumen Gentium, 25), permitir que estas enseñanzas moldeen y dirijan su vida personal, sus decisiones institucionales y su compromiso con la vida de la sociedad en todo nivel. El Santo Papa confía en que, como voz articulada y respetada de la fe católica, Caballeros de Colón continuará defendiendo dichas enseñanzas mediante los argumentos de la razón y la participación responsable en la vida cívica y social. En su reciente encíclica social Caritas in Veritate, Su Santidad, siguiendo la tradición de sus predecesores, señaló la intrínseca relación entre verdad, amor y justicia en la visión cristiana. Es el amor, como libre entrega de sí mismo, el que nos lleva a descubrir la más profunda verdad acerca de nosotros mismos y nos inspira a trabajar por el verdadero bien de la familia humana y, ciertamente, por el bien humano supremo que es nuestro destino eterno en el plan divino. Con base en su experiencia del poder que le otorga el amor de Dios, la Iglesia está convencida de que “la justicia es la primera vía de la caridad” (op. cit. 6) y una parte esencial de su misión de atraer a todos los hombres y las mujeres a la plenitud de la vida y a la verdad en Cristo. La Orden de Caballeros de Colón, fundada como asociación fraternal y caritativa de católicos laicos, ha reflejado durante mucho tiempo esta esencial unión entre la caridad y la justicia en sus excepcionales tradiciones de trabajo voluntario al servicio de los demás, especialmente para aquellos con las mayores necesidades materiales y espirituales. Así, el Santo Padre ofrece sus piadosos buenos deseos para el Año del Voluntariado que su Orden celebra actualmente, y exhorta a los Caballeros, en la vasta red de sus consejos locales, a renovar su fervor por las obras de caridad, como una expresión tangible “de la fe que obra por medio del amor” (Gálatas 5,6) y dirige toda la actividad humana hacia su plenitud última en el Reino de Dios. El 19 de junio pasado, la Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, Su Santidad inauguró un Año Sacerdotal, invitando a toda la Iglesia a contemplar nuevamente el misterio y el don del sacerdocio. Con profundo aprecio por el inquebrantable compromiso de los Caballeros en la promoción de las vocaciones sacerdotales y religiosas en todo el mundo, apela a todos los miembros de su Orden para que celebren este Año orando fervientemente por el aumento de las vocaciones, apoyando a los sacerdotes en su sublime y demandante ministerio y, motivando a los jóvenes para que sean generosos y abiertos al llamado del Señor. Que este Año todos los Caballeros reflexionen con gratitud sobre la inmensa cosecha de bien que es resultado de la visión pastoral y el entusiasmo apostólico de los extraordinarios sacerdotes parroquiales, como el Siervo de Dios Padre Michael McGivney y el Cura de Ars, San Juan María Vianney, y oren para que nuestro Señor continúe creando nuevas generaciones de pastores según su propio corazón (Jeremías 3,15). Imitando una constante preocupación del santo Cura, de igual modo el Santo Padre pide a los Caballeros, que en sus familias y en sus consejos locales, enfaticen la ayuda a los jóvenes “para rezar, y rezar bien”, porque está convencido de que “se puede tener confianza en que los jóvenes, si saben rezar, sabrán qué hacer ante el llamado de Dios” (Discurso a los obispos de Estados Unidos, Washington, 16 de abril de 2008). Con estos sentimientos y con gran afecto en el Señor, Su Santidad encomienda a todos los reunidos en Phoenix a la amorosa intercesión de María, Madre de la Iglesia. A los miembros del Supremo Consejo y a todos los Caballeros y sus familias, les imparte cordialmente la Bendición Apostólica como promesa de abundante gracia divina. Con mis mejores deseos personales por el éxito de la reunión, Atentamente Desde El Vaticano, 20 de Julio de 2009 Cardenal Tarcisio Bertone Secretario de Estado del Vaticano 127 Convención Suprema Saludos del Presidente de México, Señor Felipe Calderón Hinojosa a la 127 Convención Suprema que tiene lugar del 4 al 6 de agosto de 2009 en Phoenix, AZ. Estimado señor Anderson: Me complace por este medio enviar un cordial saludo a los miembros de la Orden de los Caballeros de Colón, en ocasión de su 127? Convención Anual. La tarea fundamental del gobierno es velar por el bien común. Sin embargo, este propósito es compartido por personas solidarias, quienes con su actitud filantrópica han decidido asumir su responsabilidad social y trabajar en favor de sus comunidades y de los que menos tienen. Es el caso de los Caballeros de Colón, que a lo largo de su existencia han dado muestra de su compromiso con los principios más importantes para la convivencia humana y la vocación de servicio a los demás, por lo que les externo mis sinceras felicitaciones por este 127? aniversario. Deseo que continúen logrando sus objetivos para este año, pues los tiempos que hoy vivimos son de enormes retos, en los que todos tenemos algo que aportar. Atentamente, Felipe Calderón Hinojosa Presidente de los Estados Unidos Mexicanos